Cuando supe de las primeras motos eléctricas, las cuestioné mucho con argumentos como ¿qué pasa si se mojan?, ¿tardarán más de 10 horas en cargarse al 100%?, ¿serán necesarios los mismos cargadores que con los autos?, ¿tendrás buena autonomía?, ¿qué tan económicamente accesibles serán?
Lo anterior viene al caso porque hace unos días manejé la FXE de ZERO, una marca creada en California por un ex ingeniero de la NASA.
La FXE es una moto diseñada para quienes buscan velocidad, potencia y, sobre todo, agilidad. Con una posición de manejo cómoda (eso sí, un poco alta: 836 mm del asiento al suelo), te puedo decir que en el tráfico la puedes maniobrar sin problema, ya que el bajo centro de gravedad te permite moverla de un lado a otro sin sentir que te gane el peso.
Es un hecho que hasta ahora las motos eléctricas siguen siendo de ciudad, pues a pesar de su deportividad, velocidad y torque, su autonomía es de más o menos 110 kilómetros por recarga, mientras que en carretera ofrecen un aproximado de 60 kilómetros.
La accesibilidad para recargarla es de lo mejor, ya que sólo requiere de un cable que puedes enchufar en cualquier entrada de corriente eléctrica que encuentres a 110 voltios, ya sea en la calle, en algún centro comercial o en tu casa.
La carga es muy eficiente, porque mientras estás de compras o de visita en algún lugar puedes enchufarla y así tener una mayor posibilidad de moverte sin problema por la ciudad. Tarda hasta seis horas en cargar al 100%.
Eléctrica
46 caballos
Batería: 7.2 kWh
Desde $299,990
