En una ciudad donde lo gourmet convive con lo urbano a cada paso, hay joyas escondidas que elevan la experiencia cotidiana. Justo en la intersección de Campos Elíseos y Andrés Bello, frente al icónico W Mexico City, un food truck irrumpe con una propuesta que conquista desde el primer aroma: café recién hecho, pan dorado y la promesa de sabores que reconfortan.
Este pequeño pero vibrante espacio se integra con naturalidad al ritmo acelerado de Polanco, ofreciendo una opción accesible, pero con el sello de sofisticación que caracteriza al hotel. Ideal para quienes viven, trabajan o simplemente disfrutan de caminar por la zona.
Del desayuno al capricho vespertino
La carta, pensada para todas las horas del día, arranca con una dupla ganadora: grilled cheese sandwich con café. A partir de $99 pesos, es la fórmula perfecta para comenzar la mañana con buen pie.
Al mediodía, los sándwiches suben la apuesta. Destaca el short rib, cocido lentamente hasta alcanzar una textura jugosa y potente. Le siguen el marinated ham, con ese toque de adobo que despierta el apetito, y el mediterranean, fresco y lleno de notas herbales. Cada uno se sirve con papas naturales o adobadas: crujientes, sazonadas y listas para compartir.
Un plan que se saborea a tu ritmo
¿Plan de brunch al aire libre con amigos? ¿Una pausa entre juntas? ¿Un break en solitario con buen playlist de fondo? Cualquiera que sea tu mood, este food truck tiene el ambiente perfecto. Con mesas sobre la acera y una vibra relajada, te invita a quedarte un rato, disfrutar sin prisa y reconectar con esos placeres simples que muchas veces dejamos pasar.
Los acompañamientos —como los nachos con guacamole o un bowl de quinoa fresco y lleno de texturas— están pensados para reunir, picar y prolongar la conversación. Todo, con porciones generosas que hacen justicia al concepto de comfort food.
Postres que abrazan el alma
El broche de oro viene con los dulces. Desde las clásicas crepas de Nutella y fresa hasta un sorprendente tocino del cielo, ese postre español con yemas caramelizadas que se deshace en la boca. También hay budín de pan y un tiramisú que te transporta directo a Italia con cada cucharada. Detalles dulces, simples, pero memorables.
El sabor de lo cotidiano elevado al siguiente nivel
Lo que propone el W Mexico City no es solo un food truck: es una experiencia que transforma lo casual en algo especial. Una pausa que no rompe con tu día, sino que lo mejora. Y lo mejor: lo hace con precios accesibles, sin comprometer calidad ni estilo. Porque sí, en Polanco también hay espacio para el antojo sin culpa.
