El verano llegó y con él los recuerdos de días interminables sin responsabilidades y tardes de compras en el centro comercial para escapar del calor de julio.
Quizás es esta nostalgia la que ha impulsado el regreso de un clásico de la moda de los 2000: las jelly sandals; sin embargo, si no estás lista para volver a calzar esos coloridos y suaves zapatos, puedes sumarte a la tendencia de una manera más sutil y chic: ¡uñas jelly!
Las uñas jelly están arrasando en redes sociales y estarán más fuertes cada mes. Este estilo de uñas se caracteriza por sus tonos transparentes y brillantes, parecidos a los caramelos Jolly Rancher, ¿los recuerdas?
Además de usar un esmalte sólido con acabado jelly, puedes incorporar tus diseños favoritos como puntas francesas o lunares. Otra opción es jugar con texturas usando esmaltes jelly como base y añadiendo acentos de glitter o matte.
Sea cual sea el camino que elijas, prepárate para recibir cumplidos y preguntas sobre tu manicura.
Toma nota
El principio básico de este estilo es el juego de colores brillantes y transparencias. Para lograr el efecto perfecto, lo mejor es acudir a una manicurista, pues estrictamente hablando, las uñas jelly están hechas de acrílico translúcido.
No obstante, puedes obtener un resultado bastante similar en casa al mezclar barniz transparente con tu color favorito y luego aplicar una capa como lo harías normalmente.
Esta tendencia ofrece un amplio terreno para la experimentación, ya que sus transparencias permiten varias posibilidades al momento de incluir elementos decorativos como lentejuelas, brillos y detalles pequeños que quedan “encapsulados” en el barniz o el acrílico.
Y aunque las uñas jelly tradicionalmente proponen una estética coqueta y colorida, también puedes probar con tonos más oscuros para obtener una manicura más elegante.
