Las orquídeas son una de las especies botánicas más antiguas, numerosas y variadas que existen en el mundo. Crecen prácticamente en cualquier parte (excepto la Antártida, ya que no toleran el frío) y por sus interesantes características y enorme atractivo estético, sus flores son una de las favoritas de muchos.
Estas plantas florales son un elemento decorativo exquisitamente natural y elegante para adornar los espacios. Ha tomado gran popularidad entre la decoración interior y cada vez las personas deciden tener una en sus hogares u oficinas por su fácil cuidado. Si estás por adquirir una o ya la tienes, estos son algunos puntos que comparten los expertos de The Home Depot para mantenerlas en buen estado por mucho tiempo.
Temperatura ideal
¿Sabías que esta flor es originaria de los trópicos? Es amante de la humedad con niveles entre el 55 y 77 por ciento, así como temperaturas que oscilan entre los 15 a 22°C, así que el lugar donde la coloquemos debe ser lo más similar a su hábitat natural para conseguir que se mantengan en floración y en buen estado. Los lugares ideales para colocarlas son áreas donde se tiene encendido el aire acondicionado de forma constante o la mayor parte del día. Esto les favorece mucho y las mantendrá en buen estado por más tiempo.
Luz y riego
Debes buscar un lugar con buena iluminación, pero nunca exponerla directamente a los rayos del sol, ya que éstos pueden quemarla. Cuando se adquieren en macetas, son cultivadas en dos tipos de sustrato: coco y sphagnum moss. En ambos el riego se debe realizar cada 15 a 20 días, dependiendo de las condiciones del clima (verano 15 días, invierno 20 días).
La forma correcta de regarla es de directamente en el sustrato o tierra. Evita el agua en exceso y que no toque las hojas y las flores. De preferencia utiliza agua purificada, ya que el agua de grifo o de la llave contiene alta cantidad de minerales que pueden dañarla. Como recomendación, utiliza macetas traslúcidas para identifica si le falta o sobra agua. Puedes identificarlo de la siguiente forma:
Raíces blancas: falta de agua
Raíces verdes: bien hidratada
Raíces café o negro: sobre hidratada. Su raíz está podrida o tiene problemas.
Enfermedades
Las orquídeas, al igual que las demás plantas, padecen enfermedades y puede detectarlas así:
Hongo Fusarium: Las hojas se empiezan a poner amarillas-negras desde el cuello de la planta y esto termina siendo irremediable.
Bacteria Erwinia: Esta bacteria es muy agresiva ya que ataca a las hojas dándoles una apariencia gelatinosa y un olor desagradable, una vez que se infecta se debe desechar de inmediato y evitar el contacto con otras plantas. Como tip extra, incluye fertilizante orgánico para orquídeas en sus cuidados, éste le ayuda a su correcto desarrollo y es 100% saludable. Además, asegura el color intenso de las flores.
