La nueva Grand Vitara se parece mucho más a su antecesora que a aquel modelo que dejó de venderse a mediados de la década pasada.
Desde mi punto de vista se trata de un vehículo perfecto para circular en ciudad (con ocasionales salidas a autopista y carretera) gracias a que entrega un consumo de combustible muy bajo. Cuenta con una suspensión en general cómoda y su tamaño es ideal para estacionarla donde sea.
Acerca del motor, gracias a que sus sistema entrega hasta 102 caballos, aunado a que el peso está apenas por encima de una tonelada, el consumo de combustible es bajo: 16.1 km/litro (6.2 l/100 km).
Lo anterior es fantástico, excepto en autopista y carretera, donde es necesario revolucionar mucho para completar adelantamientos y rebases, o simplemente para conservar la velocidad mientras subimos alguna pendiente.
La suspensión sorprende debido a que sus amortiguadores y resortes aislándoselas muy bien tanto en bajas como en altas frecuencias al pasar un bache o un tope, al igual que al rodar sobre asfalto maltratado o en terracería ligera. En tanto, el perfil de sus neumáticos (215/60 R17) es lo suficientemente grueso para ir a gusto casi en donde sea.
Por dentro, la Grand Vitara es un Suzuki con todas las letras. Los acabados y materiales son en general espartanos, como siempre, aunque debemos reconocer que esta vez mejoraron con respecto a su antecesora.
Destaca el forro del volante y que en esta ocasión la marca estrena un nuevo hardware que resulta en un sistema de info-entretenimiento mucho mejor logrado: no sólo la pantalla más grande, también cuenta con mejor resolución y color, además de que el procesador es más rápido. Por si fuera poco, es compatible con Android Auto y Apple CarPlay.
Así que retomando lo que comentaba al inicio, si lo que buscas es estar principalmente en la ciudad, consumir poca gasolina e ir co4modo sin importar el tipo de camino, definitivamente la Grand Vitara es un producto que deberías considerar.
Gasolina
L4 turbo, 1.5 litros
102 caballos
Desde $539,900