Su camino hacia la cima no se detiene
Fueron varios los triunfos y muchos los circuitos que recorrió Sebastián Zurita a lo largo de este año que está a punto de terminar.
El joven actor, quien pertenece a la escudería Zurita-Bach, compara este 2015 con un ciclo de competencias de la Fórmula Uno donde él y su monoplaza volvieron a ganar el reconocimiento del público fanático de su trabajo.
Franco y sin rodeos, como acostumbra, el actor nos habla del recuento que hace de este año en el que se coronó campeón al regresar a la pantalla chica, y además fue un periodo en el que desarrolló varios proyectos que se cristalizarán en 2016 y le harán sentir la misma emoción que un piloto experimenta al estar a punto de concluir una competencia de nivel internacional.
¿Qué nueva competencia laboral emprenderás?
Hay propuestas de trabajo interesantes, me ofrecieron una telenovela y una película, pero hay que cuadrar fechas porque me voy de vacaciones en diciembre y eso no lo cambio por nada del mundo. El 18 de diciembre bajamos la cortina y son vacaciones familiares, que son inamovibles.
¿Cómo defines el año que termina?
Como un periodo de muchos retos alcanzados; el principal es que inició la producción de la película Presencias, una historia de terror que haré con Videocine; yo produzco y actúo. Es un proyecto que traía de tiempo atrás, pero no lo había levantado hasta hace unas cinco semanas, y ahorita ya estamos en lo que es la pre-producción, terminando de financiar para empezarlo a filmar a principios del próximo año.
¿A quién llamarás para integrarse al elenco?
Está por definirse, justo estamos en ese proceso. En un primer momento estaba Mayte Perroni, pero está en novela y no sé si por fechas vaya a cuadrar, entonces tengo que buscar.
Y en las pistas del teatro, ¿qué planes tienes?
También arranco la producción de dos obras que produzco en 2016. Una es un thriller policiaco con tres personajes, donde vamos mi papá y yo actuando, y la idea es que inicie temporada a mediados de año, todo depende de cuándo se filme la película porque al terminar nos seguimos con los ensayos. La otra obra es de crítica social y estará lista para octubre.
Te gusta trabajar con anticipación como buen estratega…
Mucha gente no lo sabe, pero estudié Economía en Administración de Empresas, los negocios me fascinan. Para mí hacer una película es como abrir un restaurante, me divierte mucho el proceso de elegir el guión, armar el proyecto, buscar inversionistas; igual producir teatro, leer historias, apartar el teatro, esos procesos los disfruto mucho.
Tus papás son tus coaches principales…
Tenerlos es igual a estar con los mejores en los pits, ellos representan un buen filtro para mí. He visto todo lo que han hecho y quizá por eso tengo un ojo muy crítico. Siempre me dan su respaldo y saben ser papás y profesionales. No ha habido un proyecto en que no les haya pedido su opinión, estudio lo que me dicen y al final yo decido. Y como siempre he dicho, el apellido no actúa, uno es el que decide y el que disfruta del éxito o asume si fue un desatino.
¿Te molesta que sean críticos con tu trabajo?
No, al contrario. Es padre llegar a casa y ver que mi papá está viendo la telenovela en la que estoy, a veces me tocan mis cátedras, me dice cómo me ve, siempre me da sus apreciaciones tanto como papá como productor y director. En Eddie Reynolds me dijo que me veía opuesto a lo que hago en televisión, y me hizo sentir muy bien.
Ya debes saber cuándo un guión es bueno o malo…
Como diría Felipe Cazals: “Hay que tener buen olfato, saber oler el hueso”, y es muy chistoso, pero sí me doy una idea porque filtro más rápido las cosas. Uno aprende a elegir el mejor personaje aunque no sea el protagonista.
¿Te causa algo el que te llamen para personajes que no son los principales?
No, hay momentos en los que debemos elegir entre un protagonista o una parte especial pequeña, pero importante; por ejemplo, en Eddie Reynolds hice una actuación especial y estuve rodeado de los cinco mejores actores de México; ahí no importaba ser o no el estelar, sino ver con quién estaba trabajando y ver qué es lo que yo daba para estar a la atura de tanto talentoso.
Con Emiliano, tu hermano, ¿cómo te llevas?
Me he unido muchísimo a él, ahora estamos escribiendo cuatro series que ya están en pilotos, estamos puliendo detalles para presentarlos a Netflix o Televisa. Trabajar juntos se dio porque empecé a escribir la sinopsis de una serie y se la leí, ya que él escribe muy bien, ha ganado premios desde chico por sus textos, y así empezamos a desarrollar la idea y hemos enriquecido el concepto ya sea cada vez que nos vemos o vía Internet.
Entonces será tu copiloto en los proyectos próximos…
Está presente en todo lo que viene. En los planes de teatro está creando las escenografías porque es arquitecto, es otra manera de desarrollar colaboraciones en familia.
¿Con qué trabajo consideras que te has subido al podio?
Mi campeonato ganado fue Ciudadano Buelna, de Felipe Cazals, es mi segunda película, pero la primera en serio. Fue una gran experiencia, desde el casting que fue de tres días. Estoy seguro que muchos actores hubieran pagado por estar ahí; fue impresionante cuando me dijo que iba a ser el protagonista, y cuando se estrenó salí con el ofrecimiento de cinco películas más.
¿Por qué no habías hecho cine antes?
Busqué las oportunidades, pero iba a los castings, luego al call back y terminaban diciéndome que no me daban el papel porque no parezco mexicano, porque estoy muy güerito, porque iba de parte de Televisa o porque sólo había hecho telenovelas; creo que el mundo del cine es muy reducido.
Por eso te hemos visto más en televisión…
Sí, aunque no me gusta hacer una telenovela tras otra, me cuesta mucho trabajo empezar una rutina igual de intensa a la que acabo de concluir; sé que hay muchos actores que lo hacen, pero yo necesito cambiar de aire y luego iniciar otra vez, esos son mis ritmos.
¿Has abandonado la pista en plena competencia?
Ha pasado, y sin decir nombres ha habido proyectos con los que he creído que llegaría en primer lugar y no alcancé a dar ni la primera vuelta. Mi primera película tardó nueve años en salir, y cuando se estrenó tampoco fue una maravilla, ya cuando la vimos sólo respiramos y dijimos: “Ya salió”. También me la han hecho al revés: va a empezar el proyecto y me han bajado sin saber por qué; son cosas de las que hay que aprender.
¿Te gusta la velocidad en tu vida?
Sí, así han sido los últimos años en mi vida, pisando siempre el acelerador, siempre dándole forma a ideas y echándolas a andar; aunque hace poco escuché a alguien decir que había pasado tanto tiempo corriendo y ya era hora de caminar, y me identifiqué porque mi velocidad siempre está a 20 pasos de donde estoy, y eso no me ha permitido disfrutar los triunfos que he tenido, por estar siempre viendo qué sigue.
Entonces también eres fanático de la adrenalina…
Claro, por eso me gustan los negocios. Justo ahora estoy desarrollando la idea de comprar un edificio con 19 departamentos, eso es lo que me produce adrenalina.
Y como emprendedor, ¿cuáles han sido tus logros?
Entrar a una junta con un inversionista billonario que me concedió sólo cinco minutos para hablarle de mi proyecto y convencerlo de que es una buena oportunidad invertir conmigo.
Además tienes negocios alternos a tu actividad artística…
Tengo restaurantes y los antros que me mantienen bastante ocupado, pero lo importante es balancear el tiempo y saber cuándo puedes relajarte y cuándo hay que apretarle al trabajo.
Hablando de periodo de relajación, dices que tomarás un descanso próximamente…
Las vacaciones de fin de año son un espacio que guardamos los cuatro para estar juntos. Mi hermano vive en Nueva York, mis papás en Miami, yo estoy acá y es difícil que coincidamos, por eso a final de año nos damos nuestro tiempo juntos.
¿Ya tienen algún destino donde pasarán las fiestas de fin de año?
Nos esperan unas ansiadas vacaciones en Australia y Nueva Zelanda, pero más que el lugar, lo importante es que no hemos perdido la costumbre de darnos ese tiempo; hacemos lo posible por estar juntos, para dedicarnos tiempo, y tanto mi hermano como yo lo sabemos porque mis papás siempre lo acostumbraron, ya es una tradición.
CUESTIÓN DE ESTILO
Loción: “Bvlgari, la uso desde que tengo memoria”
Diseñador: “Calvin Klein, de tres cosas que traigo puestas, dos son de ellos”
Música: “Dave Matthews Band, Kings of Leon; escucho literalmente de todo, la música me fascina”
¿Qué estás leyendo?: “La catedral del mar, me ha costado trabajo, pero ya voy a la mitad”
Director: “Felipe Cazals, muero por volver a trabajar con él”
FRASES
“Mucha gente no lo sabe, pero estudié Economía en Administración de Empresas, los negocios me fascinan”
“Así han sido los últimos años en mi vida, pisando siempre el acelerador, siempre dándole forma a ideas y echándolas a andar”
“Ha habido proyectos con los que he creído que llegaría en primer lugar y no alcancé a dar ni la primera vuelta”
