Céline Dion está enfrentado una dura batalla, que al parecer va perdiendo. Hace un año, en diciembre de 2022, la cantante dio a conocer que sufría una enfermedad neurológica conocida como síndrome de la persona rígida. “Trabaja duro, pero ha perdido el control de sus músculos”, comentó su hermana Claudette al medio 7 Jours.
El síndrome de la persona rígida, considerada como una enfermedad rara, se caracteriza por episodios de rigidez y espasmos musculares que muchas veces se producen por una sensibilidad aumentada al ruido, al tacto y como una respuesta al sobresalto. Las personas con el síndrome también pueden asumir posturas anormales y se sabe que afecta más a las mujeres que a los hombres.
Muchas personas con este síndrome sufren ansiedad y depresión, probablemente por causa de los síntomas que afectan sus actividades diarias. Los científicos aún no saben cuál es la causa, pero la investigación indica que es el resultado de una respuesta autoinmune anormal en el cerebro y la médula espinal.
“Como muchos saben, siempre he sido un libro abierto y no les había dicho antes, pero estoy preparada para hacerlo ahora. Llevo mucho tiempo lidiando con problemas de salud y ha sido muy difícil para mí”, fueron las palabras que utilizó la cantante para compartir su situación con sus fans.
No pierden la esperanza
Debido a su padecimiento, Céline decidió cancelar todas sus presentaciones de este año para cuidarse lejos de los escenarios.
“Hay algunos que han perdido la esperanza porque es una enfermedad que no se conoce. Lo que me duele es que ella siempre ha sido muy disciplinada. Siempre trabajó duro.
“Mamá siempre le decía: ‘vas a hacer esto y lo vas a hacer bien’. Es cierto que, en nuestros sueños, la idea es volver a los escenarios. ¿En qué estado? No lo sabemos. Las cuerdas vocales son músculos y el corazón también es un músculo. Esto es lo que más me preocupa. Y dado que es un caso entre un millón, los científicos no han investigado mucho”, informó su hermana.
Claudette también contó que otra de sus hermanas, Linda, se mudó a la casa de Céline para cuidarla más de cerca.
“No encontramos ninguna medicina que funcione, pero tener esperanza es importante. A pesar de estar en las mejores manos, mi hermana no mejora y necesita cuidados continuos”, indicó.