Con la llegada del otoño, los mercados mexicanos se llenan de aromas y colores que invitan a disfrutar de los sabores más emblemáticos de esta época del año.
Las mandarinas, el cempasúchil, la guayaba y la calabaza no sólo decoran nuestras mesas y altares, sino que también se convierten en ingredientes perfectos para una bebida que abraza y reconforta: el atole.
A continuación te compartimos cómo preparar atoles inspirados en estos ingredientes de temporada.
Atole de Mandarina
Este atole es una explosión de frescura y dulzura cítrica, ideal para una tarde fresca de otoño. La mandarina, con su característico aroma, se convierte en una bebida ligera y refrescante.
Ingredientes:
- 6 mandarinas grandes (el jugo)
- 1 litro de leche
- 100 g de masa de maíz
- 1 raja de canela
- Azúcar al gusto
Preparación:
En una cacerola hierve la leche con la canela. Mientras tanto, diluye la masa en el jugo de mandarina y agrégalo lentamente a la leche caliente, removiendo constantemente para evitar grumos. Endulza al gusto y sigue moviendo hasta que espese. Sirve caliente y disfruta de su sabor.
Atole de Cempasúchil
El cempasúchil, flor tradicional del Día de Muertos, también puede transformar un atole en una experiencia única. Su delicado sabor floral y su color intenso lo hacen una bebida tan bella como deliciosa.
Ingredientes:
- 20 pétalos de cempasúchil (limpios y sin tallo)
- 1 litro de leche
- 100 g de masa de maíz
- 1 raja de canela
- Miel al gusto
Preparación:
Infusiona los pétalos en la leche caliente junto con la canela durante unos minutos. Cuela la mezcla para retirar los pétalos y luego agrega la masa disuelta en un poco de agua. Cocina a fuego lento sin dejar de mover hasta que espese. Añade miel al gusto. Este atole sorprenderá a tus invitados con su suave sabor y su intenso color dorado.
Atole de Guayaba
La guayaba, una fruta llena de vitamina C y con un aroma dulce y penetrante, es ideal para los días fríos. Su sabor intenso se equilibra perfectamente en un atole cremoso y reconfortante.
Ingredientes:
- 6 guayabas maduras
- 1 litro de agua
- 100 g de masa de maíz
- 1 raja de canela
- Azúcar al gusto
Preparación:
Hierve las guayabas con la canela en el litro de agua. Cuando estén suaves, licúa las guayabas (sin las semillas) y devuelve la mezcla a la olla. Disuelve la masa en un poco de agua y agrégala a la mezcla. Cocina a fuego bajo, revolviendo constantemente hasta que espese. Endulza al gusto y disfruta de su fragancia inigualable.
Atole de Calabaza
La calabaza, uno de los ingredientes más tradicionales de la temporada, es perfecta para un atole espeso y dulce. Su sabor terroso y ligeramente ahumado se realza con especias como la canela y el piloncillo.
Ingredientes:
- 500 g de puré de calabaza
- 1 litro de leche
- 100 g de masa de maíz
- 1 raja de canela
- Piloncillo al gusto
Preparación:
Hierve la leche con la canela y el piloncillo hasta que este último se disuelva. Añade el puré de calabaza y mezcla bien. Disuelve la masa en un poco de agua y agrégala a la mezcla. Cocina a fuego bajo, revolviendo hasta que el atole espese y esté bien incorporado. Este atole es perfecto para acompañar un pan de muerto o cualquier postre de la temporada.