Aunque actualmente es una de las actrices más populares, su destino pudo haber sido completamente diferente.
Resulta que antes de protagonizar ‘Wonder Woman’, estuvo a punto de renunciar a su sueño de actuar en la pantalla grande. Esto, debido a que fue rechazada muchas veces en innumerables castings. «Pensaba que lo mejor hubiera sido no volver nunca a Los Ángeles. En ese momento estaba convencida de que lo más conveniente sería quedarme en Israel, trabajar como actriz de vez en cuando, regresar a la Universidad y hacer cualquier otra cosa que me gustara», confesó para la revista ‘Glamour’.
Incluso, asegura que esta serie de hechos la marcó considerablemente: «Llegué a un punto en el que simplemente no quería volver a tener que pasar por todo eso, porque obtuve demasiadas decepciones. Ibas a una audición y luego recibías una llamada de teléfono, luego tenías otra llamada y después una prueba de cámara. En ese momento la gente te daba esperanzas diciéndote que el papel te iba a cambiar la vida, y al final resultaba que te quedabas sin él».
Por si fuera poco, la presión familiar también estuvo a punto de orillarla a abandonar su anhelo: «Mi marido trabaja mucho en Tel Aviv (Israel), y en esos tiempos ya teníamos una hija, así que tener que estar lejos de ella o llevármela a Los Ángeles me supuso una presión adicional. Y claro, cuando me sentía tan estancada me decía: ‘¿Por qué estoy haciendo todo esto?’. De tanto escuchar ‘no, no, no’, acabé cuestionándome si era buena o no. Y justo después me dieron el papel de ‘Wonder Woman'».
Sin duda, hubiera sido un grave error alejarse de la actuación, pues con belleza, talento y carisma se ha ganado la admiración de millones de personas en el mundo.
Tú, ¿qué habrías hecho en su lugar?