Ashley Graham, la modelo de tallas grandes, se consolida con corona de reina en la industria durante la Semana de la Moda de Nueva York. La modelo y diseñadora, que ha protagonizado reportajes en Elle, Vogue o Harper’s Bazaar, ha cautivado en la Semana de la Moda de Nueva York con su presencia en la pasarela. Fue el año pasado cuando su carrera y su nombre subieron como la espuma, tras su éxito con creaciones de lencería. Graham es una las modelos de tallas grandes más cotizadas y planea convertirse en una empresaria del sector.
La noche del miércoles en Nueva York comenzó con una colección de prêt-à-porter que abarca todo, desde ropa de oficina, pasando por vestidos de cóctel con lentejuelas, e incluso lencería. Graham desfiló como una más sin importarle sus kilos de más.
“Sé que mis curvas son sexis y quiero que el resto del mundo sepa que las suyas también lo son. No hay razón para esconderse, pero sí muchas para presumir”, ha dicho Ashley Graham. “El mundo está preparado para más curvas en biquinis”.
«Estoy en el momento de erigir un imperio», confesó a la revista Maxim en primavera, de la que fue portada, marcando otro hito en la historia de la publicación. En ella, la modelo celebra la diversidad en el sector, pero deja patente su intención de consolidar la tendencia. La estadounidense, de 27 años, considera que no puede hablarse de verdadera inclusión en la industria hasta que estas mujeres no opositen a, por ejemplo, ser imagen de firmas tradicionales.
La modelo desea crear una marca con líneas de accesorios, programas de acondicionamiento físico e incluso un libro. También maneja la posibilidad de crear su propio Ashley Graham Show, inspirado en el espacio que protagonizó en su día Tyra Banks.