En su interior, la CX-50 ofrece un amplio espacio, mientras que la posición de manejo es cómoda en cualquier terreno, ya sea en ciudad o carretera.
Cuenta con una pantalla de info-entretenimiento de 10 pulgadas compatible con Android Auto y Apple CarPlay, conectada a un sistema de audio firmado por la marca Bose de 12 bocinas.
Aunado a ello, ofrece acabados, ensambles y materiales muy buenos. Sin lugar a dudas se trata de un extraordinario lugar para estar, independientemente del camino o del destino.
Su motor turboalimentado de cuatro cilindros y 2.5 litros genera una potencia de 227 caballos y 310 libras-pie. Gracias a lo anterior, la aceleración es contundente y el manejo es muy alegre. Sin embargo, me parece justo decir que este es uno de esos motores sedientos de gasolina.
Al ser de corte off-road de ligero a medio, cuenta con un sistema de tracción en las cuatro ruedas. Todo ello se combina con una transmisión automática de seis velocidades y detalles estéticos en su carrocería.
Podemos notar que no pierde el lenguaje estético de Mazda. Tiene un frente robusto y agresivo que se hace notar por dos grandes tomas de aire en los costados de la fascia, así como un chasis ensanchado y unos rines de 20 pulgadas.
Gasolina
227 caballos
Desde $849,900