El príncipe William y la duquesa de Cambridge Kate, llegaron a Canadá… pero en esta ocasión los acompañarnos los más pequeños del palacio. Esta sería la primera vez que sus dos hijos los acompañan en un viaje trasatlántico.
Tras un largo vuelo de más de 10 horas, los duques de Cambridge aterrizaron en Victoria, Columbia Británica junto a los baby royals, quienes se coordinaron con su madre y usaron vestimentas azules. El príncipe George portó un conjunto de la firma española Pepa & Co, mientras que la princesa Charlotte lució un vestido azul pastel con flores.
La familia real fue recibida por el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, y su esposa, Sophie, quienes lucieron felices ante esta llegada. «Los canadienses tienen inmenso afecto por la familia real Sophie y yo estamos ansiosos de mostrarles la belleza de la Columbia Británica y sensibilizar sobre los problemas de los jóvenes y de los problemas de salud mental», dijo Justin en una conferencia de prensa, haciendo alusión al recorrido que harán por un centro de refugiados y de niños con retraso mental.
La elegancia y sofisticación de Kate ha ido en aumento y este evento fue el pretexto perfecto para decir que deslumbró en este evento, al lucir un vestido azul de Jenny Packham, un tocado del mismo color y un broche plateado en forma de hoja de maple, símbolo de este país.
Pero el carisma de esta pareja real, fue opacado por sus dos hijos, quienes sin duda alguna fueron los protagonistas una vez más, captando toda la atención de la prensa, asistentes e incluso de la propia duquesa, quien sonreía al ver a Charlotte sorprendida por la multitud mientras metía sus dedos en la boca.
Es muy normal que casi todo el tiempo creamos que son “diferentes” a todos los niños de su edad por ser el tercero y la cuarta en sucesión al trono de Inglaterra, George y Charlotte demostraron que también se divierten con burbujas y globos como todos los demás.
En una celebración para para niños en Victoria, Canadá, en los jardines de la Casa de Gobierno de British Colombia, los baby royals se dedicaron a robar las miradas tiernas de los invitados pues, el príncipe George derritió el corazón de los presentes mientras aprendía a soplar burbujas, mientras que su hermana sorprendió a todos caminando por doquier y presumiendo sus primeras palabras o balbuceos.
La fiesta fue organizada para la diversión de los pequeños había hombres que hacían diferentes formas con globos, un mini zoológico donde la estación de conejos y ponys no pudo faltar y acompañados por 24 niños más del Military Family Resource Centre. Cualquiera de nosotros hubiéramos querido ir a una fiesta así en nuestra infancia, rodeados de reyes y príncipes.
El príncipe de 3 años y la princesa de 16 meses en esta fiesta se convirtió en su primer compromiso social por lo que su atuendo debía ser adecuado para dicha ocasión. Catherine decidió vestir a George con unos shorts y un suéter de 65 libras de la marca Wild and Gorgeous mientras que a Charlotte con un vestido de 75 libras de la marca Pepa & Co.
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El Príncipe George en su primer evento oficial
