Cuatro meses después de que la noticia de su repentina muerte estremeciera al mundo del espectáculo, surgen nuevas y controvertidas revelaciones sobre Liam Payne, ex integrante de One Direction. Un informe publicado por Rolling Stone ha vuelto a poner bajo la lupa la vida privada del cantante, señalando que, lejos de ser la imagen pulida que ofrecía en el escenario, Payne enfrentaba conflictos internos profundos y llevaba a cabo comportamientos abusivos en su relación con la escritora y exprometida Maya Henry.
Según múltiples fuentes citadas por la revista, durante la relación intermitente que mantuvieron entre 2018 y 2022, el artista habría intercambiado mensajes de contenido íntimo y provocador con otros hombres. Estas revelaciones, que insinúan que Payne “struggled with his sexuality” de manera privada, han dejado perplejos a quienes lo conocieron únicamente por su faceta musical y mediática.
Entre los detalles más inquietantes se encuentra el relato de que Henry descubrió parte de esta doble vida de la manera más insólita: al parecer, un error tecnológico permitió que se difundieran en su televisión mensajes inapropiados enviados por el propio Payne.
Pero la controversia no se limita a su vida sexual. Una fuente cercana al ambiente de confianza de la exprometida aseguró a Rolling Stone que, en el 2020, Liam habría impuesto un ultimátum devastador a Maya Henry. Según el testimonio, el cantante habría enviado el siguiente mensaje:
«Liam le envió a Maya un largo mensaje diciéndole que o se hacía un aborto y se quedaba con él, o criaba al niño sola y él no reconocería a ninguno de los dos», de lee.
Este ultimátum habría sido un giro inesperado para Henry, ya que en ese entonces la pareja se encontraba en un proceso de intentar formar una familia. La decisión de interrumpir la gestación, que la escritora luego insinuó en su novela de mayo de 2024, Looking Forward, marcó un punto de quiebre en una relación ya plagada de altibajos.
Una relación marcada por el dolor y la contradicción
El testimonio de Maya Henry no se limita a la polémica decisión relacionada con la interrupción del embarazo. En declaraciones que abarcan tanto el dolor como la complejidad de sus vivencias, la exprometida recordó episodios extremos vividos durante su relación con el cantante.
Fuentes aseguran que en más de una ocasión Payne habría mostrado comportamientos violentos, llegando incluso a empujarla por una escalera y perseguirla con un hacha en medio de discusiones que evidenciaban la dualidad de un hombre en conflicto consigo mismo.
“Amaba mucho a [Payne]. Cualquiera que haya estado con un adicto comprende lo difícil que es. Si bien lo amaba profundamente, él hizo cosas que me lastimaron de una manera que nunca entenderé del todo, y continuó lastimándome años después de que rompimos.
“Me puse en situaciones inseguras y dañinas, ignorando cada señal de alerta”, dijo Henry.
Estas palabras, pronunciadas con una mezcla de ternura y resignación, reflejan la contradicción de una relación en la que el amor se vio enturbiado por comportamientos abusivos y decisiones devastadoras. A pesar de todo el dolor, Maya Henry se mostró renuente a culpar de manera absoluta a Payne, atribuyendo en parte sus actos a los conflictos internos y las dificultades personales que enfrentaba.
El relato de Henry añade otra capa de complejidad al ya turbulento cuadro de la vida privada del artista. Dos años después de la ruptura definitiva, la exprometida protagonizó titulares al enviarle a Payne una carta de cese y desistimiento.
