¿Crees en las almas gemelas?, ¿En el destino?, ¿En las historias de amor que terminan en final feliz? Entonces tienes que conocer la historia de amor de Jemma y Daniel, que contra todo pronóstico nos muestra que las almas que están destinadas a encontrarse lo hacen de las maneras más inesperadas que podemos imaginar.
En 1989 Janine y Keryn se conocieron en el Hospital William Angliss, pues ambas estaban embarazadas y a punto de dar a luz. El destino las puso en el mismo cuarto y desde entonces comenzaron una linda amistad, que a pesar de la distancia y el tiempo, se volvió muy sólida.
Ambas familias vivían en ciudades diferentes, por lo que aunque se mantenían en contacto, no volvieron a verse.
El reencuentro
Un día Jemma encontró una bonita estética en Instagram y comenzó a seguirla, de pronto descubrió que esa peluquería era de la hermana de Daniel. Intrigada por cómo luciría en el presente, Jemma lo buscó en Facebook y comenzaron a platicar.
Cuando Jemma visitó el salón de la familia de Daniel, éste apareció por sorpresa sólo para verla. Desde entonces las chispas que siempre habían estado ahí se encendieron y las salidas se volvieron más constantes.
En 2014 se hicieron novios oficialmente y dos años después Daniel le propuso matrimonio a Jemma. Como si se tratara de una historia de amor de Disney, ambos tuvieron una boda encantadora y hoy, treinta años después de ambos nacieran en el mismo hospital, están a punto de convertirse en padres.
No podemos evitar pensar que Jemma y Daniel sin duda estaban destinados a estar juntos. Su historia nos recuerda que aunque el amor a veces es complicado, es la fuerza más grande del mundo que siempre encuentra un camino para triunfar.
