Ezequiel Rivera, un joven de 14 años originario de Culiacán, Sinaloa, se une a las filas de Los Ángeles Dodgers. Este acontecimiento marca un momento especial no sólo para el joven prodigio y su familia, sino para todo México, que ve en Rivera a una promesa del deporte nacional.
Ezequiel, conocido como «La Máquina» por su desempeño excepcional en el campo, ha impresionado a todos desde una edad temprana. Su talento ha sido reconocido en torneos locales al igual que en competencias internacionales.
Durante el Panamericano Sub-15, Rivera fue galardonado como el mejor jugador de México, un logro que reafirmó en el Campeonato Mundial de China.
Tras pasar tres meses en la academia Showtime Athletes, el joven beisbolista logró captar la atención de los scouts de los Dodgers, quienes no dudaron en ofrecerle un contrato.
Esta academia es conocida por preparar a jóvenes promesa para el béisbol profesional, y Rivera no fue la excepción. Su desempeño en las posiciones de tercera base y su capacidad para batear con potencia y precisión lo han destacado como uno de los prospectos más prometedores.
Así compartió la noticia con su mamá
La noticia de su firma con los Dodgers fue compartida de una manera muy especial. En un video publicado en sus redes sociales, Ezequiel aparece hablando con su madre, a quien le da la noticia entre lágrimas de alegría.
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«Le tengo una noticia, de que ya firmé, ma, con los Dodgers, ya por fin puede descansar. Esto va dedicado para usted y para todos, la amo mucho», fueron las palabras del joven beisbolista, reflejando el sacrificio y apoyo incondicional de su familia.
Siguiendo los pasos de leyendas como Fernando Valenzuela y Julio Urías, Rivera tiene el potencial de convertirse en otro ícono mexicano en la MLB. Su dedicación y talento son un ejemplo inspirador para muchos jóvenes que sueñan con alcanzar las Grandes Ligas.
Así, Ezequiel Rivera representa la tenacidad y el espíritu de lucha que caracterizan al deporte mexicano. Su historia es una prueba de que con esfuerzo y dedicación los sueños pueden hacerse realidad.
