Un héroe rockstar.
São Paulo.- “Estoy en busca de alguien capaz de convertirse en el próximo Robert Downey Jr.”, dice Chris Pratt mientras cualquier indicio de ruido en el interior del lujoso Hotel Fasano languidece estrepitosamente. El silencio es un indicador evidente de que nadie, ni siquiera los publicistas de expresión boquiabierta, está preparado para la franqueza del estadounidense, quien no tiene reparo en repetir la frase con la que James Gunn, uno de los principales artífices del devenir actual del Universo Cinematográfico de Marvel (MCU, por sus siglas en inglés), lo invitó a formar parte de Guardianes de la Galaxia y ser uno de los hombres cruciales (si no el que más) de la franquicia más taquillera en la historia del cine. “Quiero a alguien confiable que pueda ir y venir con Robert en escena y otras cosas que hay en mente, ¿te interesa?”, continúa el actor, quien parece ignorar la dimensión de sus declaraciones y el hecho de que, desde hace cinco años, era consciente que su camino se cruzaría, en algún punto, con el protagonista de Iron Man y el resto de los superhéroes.
Pero ¿qué vio Marvel Studios y especialmente Gunn para confiar tal encomienda a quien hasta ese entonces era más conocido por interpretar al hilarante Andy Dwyer de la serie Parks and Recreation?
Tal parece que ni el propio histrión lo sabe. Sin embargo, unos segundos bastan para creer que su singular carisma tiene algo que ver con tal decisión. Más allá de presumir el físico digno de un superhéroe, consecuencia de las intensas sesiones en el gimnasio convenidas para hacerse acreedor al rol del cazarrecompensas intergaláctico Peter Quill/Star-Lord, Pratt posee un talento innato para convertirse ipso facto en el centro de atención de cualquier lugar que pise, como sucedió una noche antes de nuestro encuentro en el Auditorio de Ibirapuera de la ciudad de São Paulo, que se estremeció como nunca antes debido a los estridentes gritos de cientos de fanáticos paulistas, con los que convivió y que vitorearon cada frase y movimiento suyo ante su evidente asombro. “No sé qué fue (lo que vieron en él), pero me sentí con la confianza y aptitudes para tomar el trabajo y hacerme cargo de los retos que en ese momento me planteó James”, menciona con modestia.
¿Te visualizas como uno de los líderes del MCU?
—Sería adelantarme mucho, por ahora me gusta ser el líder de los Guardianes de la Galaxia —responde mucho más mesurado y ahora dirigiendo discretas pero constantes miradas al séquito de personas comisionadas de velar por los intereses de Marvel Studios—. Sé que James Gunn es nuestro líder y director, además es uno de los productores ejecutivos de Infinity War, por lo que su voz es bastante poderosa y tiene una visión muy clara de las cosas; sin embargo, es muy grato para mí ser el guía de mis Guardianes, estar en el set cuidando de ellos y asegurándome de seguir siendo este tipo de héroes rockstars fuera de la ley que somos. Tras ser confirmado para la cuarta entrega de Los Vengadores y la tercera parte de Guardianes de la Galaxia, Chris goza de un futuro promisorio y una posición muy diferente a la de algunos de sus colegas. Y es que desde que los hermanos Russo (directores de Infinity War) y Kevin Feige (presidente de Marvel Studios) anunciaron que decisiones trascendentales marcarían definitivamente el rumbo del universo cinematográfico de la casa de las ideas, fanáticos e integrantes del elenco fueron arrastrados por igual a una vorágine de incertidumbre. El futuro es algo con lo que “el Chris del futuro tendrá que lidiar”. Ahora, en el corazón de Brasil, el intérprete le resta importancia al devenir del universo marvelita y prefiere enfocarse en el presente y encontrar una respuesta digna a las expectativas alrededor de Avengers: Infinity War.
Hemos llegado al momento cumbre de toda una década, ¿cómo podrías resumir 10 años del MCU?
Es algo difícil de responder, pero si tuviera que compararlo con algo, tendría que ser con la Biblia. Algunos la miran y sólo ven un libro, pero hay otros que saben que en realidad son 66 libros dándole forma a un todo; es la misma cosa —dice a bocajarro en una interesante comparación—. Hay quienes ven al MCU como un montón más de películas; no obstante, se trata de algo mucho más grande, se trata de todo un universo que engloba cintas con muchos matices y que lo mismo pueden ser cómicas, estar repletas de acción, ser auténticos thrillers o dramas shakesperianos; tienes todas estas tonalidades y cada una es fundamental en la construcción de un todo. El MCU es un universo entero de emociones, son horas y horas de historia y entretenimiento que no hacen más que evidenciar la importancia de Marvel para el cine contemporáneo.
Algunas personas consideran a Avengers: Infinity War como un evento cinematográfico más…
Claro que lo es —interrumpe Chris en un aventurado pero muy acertado ejercicio de premonición—. Llevo días esperando que alguien me pregunte si se trata de la mejor película de todos los tiempos, y sí… sí lo es. Cuando termina su frase, el actor se encuentra al borde de su asiento, y me percato de que una mirada verde se encuentra clavada en la mía. Dentro de su cabeza comienza a formularse la que será su siguiente oración. —Se trata de algo sin precedentes, algo de lo que no se tiene registro.
Se necesitaron 10 años para llegar a este evento, y lo digo así porque no es un momento cualquiera, ¿imaginas lo que esto implica?
me pregunta sin ninguna intención de que sea yo quien conteste dicha interrogante—. Se trata de una serie de factores que confabulan para hacer de esto algo único; hablo de una increíble cantidad de actores, de empatar agendas, del enorme esfuerzo que conllevó crear durante casi 20 películas el contexto para esta cinta, días y días de filmación, muchísima gente detrás y una producción exorbitante. Curiosamente días antes los hermanos Russo declaraban a los medios que ninguno de los protagonistas, a excepción de Benedict Cumberbatch, conocía el argumento completo de la película, lo que evidentemente poco importa para que Chris continúe defendiendo su postura.
¿Cuál consideras que es la mayor aportación de tu personaje a la película?
Creo que la llegada de los Guardianes de la Galaxia a esta saga le da un giro muy fresco a la dinámica de los Vengadores sopesa en un claro esfuerzo por recalcar que si existe mérito, no se debe a él, sino a un nosotros—. Muchas veces los fanáticos y miembros de la prensa me preguntaban cuándo veríamos a los Guardianes de la Galaxia encontrarse frente a frente con los Vengadores. Me imaginaba cómo sería todo eso, pero fue hasta que filmamos esta película que pude percatarme que contribuimos con nuestra irreverencia para equilibrar con humor todo ese drama presente. Creo que cada uno de los integrantes de las películas de Marvel estamos aportando algo diferente, es como si se tratara de un gran banquete al que todos hemos llevado nuestro platillo maestro.
—¿Todavía recuerdas el primer día de tu aventura dentro del MCU? —
Se siente como si hubiera sido hace una vida, pero en realidad fue hace sólo cinco años. ¡Claro que lo recuerdo perfecto! Estábamos filmando en Londres la escena principal de Guardianes de la Galaxia y estaba muy nervioso. Llevaba el traje y el casco de Star-Lord, y había niebla y mucha agua, no veía muy bien debido a la máscara que también traía… pensé que iba a morir, pero estaba feliz —cuenta sin ningún afán por contener la carcajada—. Ha sido un viaje maravilloso, el cual aún me cuesta creer. —Tras su estreno, Guardianes de la Galaxia se convirtió en un auténtico suceso en taquilla, ¿cómo sobrellevaste el consecuente éxito? —Hubo una persona que me ayudó bastante: Robert Downey Jr. Él me ayudó a comprender todo esto de mejor manera —revela sin la celeridad de sus respuestas anteriores y elucubrando su siguiente frase con un tono de real admiración—. Él me tendió la mano y un día llamó diciéndome: “Además de felicitarte, sólo quiero que sepas que aquí estoy, aquí está mi número de teléfono por si algún día me necesitas. Hay muy pocas personas en el mundo que saben lo que estás a punto de vivir, pero yo pasé por esto, así que si tienes dudas pregúntame lo que quieras, estoy aquí para ayudarte”.
—Con la inclusión de rostros nuevos en el MCU, ¿qué les dices a todos ellos que apenas comienzan su viaje?
—Trato de hacer lo mismo que Downey hizo por mí. Ni en sueños podría compararme con él, pero ya tengo un rato en esto, así que intento que toda esa experiencia sea útil de alguna forma. He tenido oportunidad de acercarme a Tom (Holland) y decirle que si necesita algo, que cuente conmigo. Siento que es una manera de retribuir toda esa generosidad que Robert tuvo conmigo y de la cual continúo sintiéndome muy feliz y afortunado.
—Ahora que hablamos de Robert Downey Jr., mucha gente considera que si Tony Stark fuera real, sería como él; entonces, ¿crees que si Peter Quill/StarLord fuera real, sería como tú?
—Esa es exactamente la manera en la que intenté acercarme a este personaje — asegura con convicción—. Digo, sé que mis circunstancias son muy diferentes a las de Peter Quill, un tipo que de chico fue raptado y llevado al espacio, no como sucede con Robert y Tony Stark, que parece que ambos tienen como 2 mil millones de dólares en el banco y cuentan con los fondos suficientes para crear su propio traje de Iron Man. Sin embargo, yo crecí en el mismo tiempo que Peter, así que comparto las cosas que ama: la música, las películas y los iconos pop, por lo que poseemos la misma ideología, así que en ese sentido somos muy similares. Creo que entonces podríamos decir que si tuviera 10 años, yo sería Peter Quill. “Súper, sólo en las películas” Momentos antes de nuestro encuentro previsto en un cuarto tapizado con pósteres en portugués de Los Vengadores, Chris se dirige a la habitación contigua para pedirle a su staff una botella de agua que se termina al instante. El incesante calor de São Paulo hace mella en él, pero la sonrisa no se esfuma. En la mesa hay una figura decorativa de Star-Lord y su rostro refleja excitación pura. —Ese soy yo… es increíble —menciona mientras se incorpora y le dedica una última mirada a la figura de acción y se enfila hacia al confesionario—. Bueno, basta de juegos, ¡es hora del show! Revolviéndose en su sillón y lanzando una mirada de escrutinio al mío como si infiriera que el que le ha sido asignado no es tan cómodo, Chris se ve sorprendido por la honestidad que pido para responder mi siguiente pregunta.
—¿En qué sentido te cambió la vida haber debutado en el MCU?
—Hombre, yo más bien diría en qué sentido no lo hizo —dice mientras enarca las cejas y abre sus brazos lo más que puede—. Tengo años como actor, años en los que he recibido muchas lecciones y gozado de muchas satisfacciones. Pero si me pides honestidad debo decirte que llegar a Guardianes de la Galaxia fue un gran paso para mí, seguramente el más importante que he dado hasta ahora; esta oportunidad me abrió las puertas para hacer muchas otras películas y me dio la posibilidad de explorar el mundo.
—¿A qué te refieres con esto último?
—A que antes había hecho televisión y había experimentado mi crecimiento en Estados Unidos, pero ahora toda mi realidad ha cambiado, mi situación se ha hecho un poco más global, permitiéndome entrar a mercados más grandes y ser reconocido en lugares en los que jamás creí posible que pasara como Brasil, México, Rusia, China o Japón. Eso me cambió la vida. Pero como si sintiera que su respuesta estuviera incompleta, Chris lanza un destello más de honestidad. —Además, esta oportunidad también me brindó la posibilidad de asegurar el futuro financiero de mi hijo —menciona sin el peculiar glamour hollywoodense que permea en la industria del entretenimiento y que en ocasiones ha limitado las declaraciones de tantas y tantas estrellas—. Muchas personas no te dicen esto, pero mentiría si te dijera que esta oportunidad no me trajo estabilidad principalmente.
—Si bien las oportunidades han aumentado, los ciclos también tienen que cerrarse en algún momento, ¿te da temor decirle adiós al personaje que te lanzó al estrellato mundial?
Así es como funciona el mundo actual, ahora todo es episódico o por temporadas. Entiendo perfecto que me encuentro viviendo una gran etapa como Peter Quill y que naturalmente todo esto tendrá que llegar a un fin, como todo en la vida. Pero cuando ese momento llegue tendré que seguir adelante, mientras eso pasa me siento bendecido de seguir con él —declara con un dejo de solemnidad que de inmediato se esfuma—. Aunque, ¿sabes?, a veces pienso que tendrán que despedirme porque siempre estoy diciendo cosas como “tengo una idea fabulosa para Guardianes de la Galaxia 19: se trata de llevar a los Guardianes a México”. Todavía me siguen diciendo que no, pero no pierdo la esperanza.
—Tal parece que ser un superhéroe te sienta muy bien, ¿vives el personaje en todo momento?
—No, súper, sólo en las películas —dice sin más—. Siempre he emparejado más con las cosas sencillas de la vida como encontrar el tiempo para estar con mi hijo. Cuando paso semanas fuera de casa, lo que más me gusta es regresar a mi granja en Washington e ir de pesca, me gusta recibir a mis viejos amigos de la escuela, tomarme unas cervezas con ellos y ver la puesta del sol. Esos momentos se sienten muy bien, esas son las cosas buenas de la vida. Algunas personas realmente viven para trabajar, y creo que yo trabajo más para vivir. Y cuando hablo de vivir, hablo de mantener las cosas sencillas, de salir y disfrutar de la naturaleza, de ver crecer a mi hijo, de pescar y hacer cosas normales, porque soy un tipo normal.