Se entrega con pasión
A SUS 22 AÑOS DA TODO POR SU PROFESIÓN Y HOY PROTAGONIZA MI ADORABLE MALDICIÓN.
Caracterizarse en la piel de otros ha sido la mayor pasión de Renata Notni desde que dio sus primeros pasos y actuaba para sus muñecas. Ahora, con tan sólo 22 años de edad, lo hace ante miles de televidentes y ha adoptado una misión: enviar mensajes positivos a la población. Desde 2006, Renata se encuentra inmersa en el mundo de la actuación y ha participado en más de una decena de propuestas como Código postal, Un gancho al corazón, La fuerza del destino y Mentir para vivir, por mencionar algunas, que la han visto crecer y la han ayudado a mejorar su técnica. Sencillez, compromiso, esfuerzo y perfección son los aspectos que han llevado a la actriz mexicana a probar las mieles del éxito en la televisión, mismos con los que buscará cumplir su siguiente meta que es salir de su zona de confort para hacer teatro y cine. Actualmente, protagoniza la telenovela Mi adorable maldición, la cual se transmite de lunes a viernes en punto de las 17:00 horas por Las Estrellas. Se trata de una historia romántica, divertida y apasionante, en la que interpreta a Aurora, una joven con un pasado conmovedor. Esta historia le permite aparecer con escaso maquillaje y Notni asegura que eso le ha fascinado, pues así deja en claro que para mostrar la belleza propia, no es necesario seguir estereotipos. Renata nos cuenta cuáles son las herramientas que ha utilizado para alcanzar el éxito, cómo nació su interés por la disciplina que la ha dado a conocer, cuáles son sus sueños, la fama a corta edad, sus intereses y su cometido con el espectador mexicano.
Tienes 22 años y ya eres una actriz posicionada, además te han llamado para proyectos grandes, ¿cuáles son tus prioridades para alcanzar el éxito?
Lo más importante es estar bien ubicada, cuando pierdes el piso todo comienza a caer. Ésta es una carrera en la que todo es efímero porque estás y de repente puedes no tener un proyecto, por eso siempre es necesario concentrarse en lo que quieres y no dejar de prepararte porque si te confías y crees que eres la actriz que México esperaba, todo se pierde.
¿Cómo defines tu presente?
Estoy en un muy buen momento de mi carrera, he ido a paso lento, pero seguro, y ahorita me llegó el personaje que deseaba; en lo profesional me siento satisfecha.
Mencionas que es el personaje que deseabas, platícanos sobre Aurora y el reto que implicó darle vida…
Como actriz se agradecen muchísimo los personajes que te sacan de tu zona de confort y te retan, que realmente debas trabajarlos, con escenas que te muevan y no sean iguales a lo que ya hiciste, y desde que empecé en los talleres, este personaje así ha sido.
Aurora viene con un pasado bastante complejo, ¿cuál crees que sea el impacto en el público?
Aquí se habla de algo muy importante que pasa en la sociedad: el bullying y las supersticiones. Mucha gente se deja llevar como ovejita por lo que dicen los demás; la novela hace énfasis en que debemos ser independientes, crear nuestro criterio, nos invita a leer y a culturizarnos para saber de la vida. Esta niña ha sido buleada, juzgada desde chiquita y nunca la han respetado.
¿Consideras que tu trabajo puede generar cambios en la población?
Quienes estamos en el escenario o en una pantalla tenemos la oportunidad de que la gente nos vea, y hasta donde pueda quiero mandar mensajes sanos a la sociedad. Las pequeñas quieren verse bonitas y a mí me gusta transmitirles la importancia de aceptarnos tal como somos.
Te vemos muy al natural en este proyecto…
En las novelas, las mujeres siempre salen perfectas, maquilladas y bonitas. En los primeros capítulos de esta historia salgo sin una gota de maquillaje y en los que vienen me ponen peor: con ojeras, pálida, despeinada y es parte del reto, despreocuparte, ponerte en las manos de los productores, escritores, del equipo en general. Confiar y decir “es mi personaje, no me importa verme bien, sino sacar adelante el proyecto”.
Mi adorable maldición se estrenó hace unas semanas, ¿qué encontrará el público en los siguientes capítulos?
Vienen cosas padres. Aparentemente, es el mismo cuento de siempre, pero tiene ingredientes que sé que a la gente les van a encantar, situaciones que usualmente no vemos en las novelas: acontecimientos impactantes, fuertes y es una novela sin violencia. En esta época está padre que la gente llegue a su casa, se olvide de los narcos, de la violencia y se siente en su sala, ría y sueñe un rato porque de pronto nos olvidamos de la magia y la tranquilidad que hay al ver una novela.
Compartes escena con histriones con una gran trayectoria, ¿cuál ha sido el mayor aprendizaje que te han dejado?
Lo que más me impresiona de ellos es su sencillez y profesionalismo. Es increíble que los señores que tienen carrera de años, todas las películas, obras de teatro y novelas sean los más puntuales, entregados y sencillos. El señor Ernesto Gómez Cruz es un maestro al que puedo aprenderle a todas horas.
Desde pequeña estás en la televisión y éste es tu segundo protagónico, pero ¿cómo nació la inquietud por la actuación?
En las pastorelas y festivales escolares yo era la primera apuntada, y me encantaba. De chiquita me metieron a clases porque me fascinaba hacerlo y en lugar de jugar con las muñecas, las utilizaba de público y me ponía a actuar, bailar y cantar enfrente de ellas; se me hacía eterno el día para llegar a mis clases.
El canto es otro de tus gustos…
Sí, me gusta, pero no soy cantante. En una serie en España canté pero fue de la nada, no era planeado; lo llegaría a hacer si realmente me preparo, me meto a clases y logro cantar algo bien, tiene que ser de calidad y no sin estar preparada, segura y lista.
A la fecha has interpretado decenas de personajes, ¿cuál te ha marcado?
Paloma Madrigal en Amor de barrio, mi primer protagónico, porque lo disfruté, tuvo muchos retos y sentir la responsabilidad de una historia encima me llenó de nervios y emoción. Era una abogada y tuve que aprender algunas cosas de Derecho que jamás había visto. Me ayudó a crecer y lo tengo muy bien grabado.
¿Qué opinas acerca de las críticas de la prensa?
La prensa siempre va a hablar, a veces bien, otras mal; me ha tocado ya de los dos y aprendí que cuando es sobre mi vida personal, no debo hacer caso porque eso es aparte de mi trabajo y no tengo por qué dar tantas explicaciones. Lo que he compartido con mis fans, el público y la prensa es porque yo he querido.
Una de las críticas ha sido porque tu pareja es mayor que tú, pero con ello demuestras que el amor no tiene barreras para ti…
Han dicho que si está muy grande y no sé que más, pero me lleva ocho años. Sí, es más grande que yo, pero pienso que para el amor no hay edades. No sé qué pueda pasar después, pero para eso no tengo prejuicios y mientras sea un buen chavo que me respete, me trate bien, acepte lo que hago y que yo admire, es más que suficiente.
Hay quienes prefieren no salir de su zona de confort, ¿a ti te motiva a hacer algo distinto a la televisión?
Siempre es padre probar de todo, no quedarte en un solo lugar. Yo no soy de las que dicen ‘ay no, ya dejaré de hacer novelas’, me gustan mucho y seguiré haciéndolas, pero sí está en mis planes realizar otro tipo de trabajo, probar otras cosas y buscar para ver qué es lo que realmente me mata. Quiero hacer cine, teatro y después, ya decidiré.
Hay una infinidad de plataformas para apreciar las novelas, ya no hay que esperar cierto horario ¿qué te parecen este tipo de propuestas?
Hoy en día la gente difícilmente ve la tele por el trabajo, la escuela, las mil actividades de los niños, entonces, qué padre que el horario no sea un impedimento para que veas lo que te gusta. Ésta es una oportunidad de crecimiento para las series y eso nos beneficia muchísimo a todos.
A los 22 años ya has probado las mieles del éxito, ¿la fama ha cambiado tu vida?
Sales a la calle, la gente te reconoce y te pide fotos, pero nada cambia, es un mito; es padre porque eso demuestra que tu trabajo está funcionando y la gente te está viendo, pero yo sigo siendo la misma, tengo los mismos amigos y voy a los mismos lugares.
El modelaje ha sido parte de tu vida desde pequeña, ¿tienes planes en ese rubro?
Estoy enfocada en la novela, modelar lo hice de chiquita, pero hace mucho que no.
¿Hubo alguna serie que te haya marcado?
Mi favorita era la de Lizzie McGuire. Yo decía “qué increíble, una serie en la que pueda cantar”, me fascinaba, y mexicanas El diario de Daniela. Cantaba todas las canciones, era fan.
¿Cuál es tu más grande sueño?
Vivir la actuación en todas su expresiones, me gustan los personajes diferentes, donde experimentas cosas que no te pasarían. Alguna vez me encantaría hacer el de una mujer bipolar y, obvio, más grande, tener una familia, eso es parte esencial de mis planes