En el municipio de Arroyo Seco, en Querétaro, se encuentra una de las atracciones más curiosas de México, el Sótano del Barro.
Cuando visites la Sierra Gorda, te sorprenderás al distinguir un agujero en medio de un cerro. El orificio, de 500 metros de diámetro, es una ventana a través de la cual puedes mirar el centro de la tierra. 450 metros de caída libre que te robarán el aliento.
Este abismo poco explorado de México también se conoce como el Sótano de las guacamayas, pues por las mañanas, estas hermosas aves en peligro de extinción salen del agujero en parvadas, creando un espectáculo inolvidable.
Para llegar al Sótano del Barro necesitarás buena condición física y espíritu aventurero, pues el recorrido montaña arriba sólo se hace a pie o en mula, acompañado de un guía. El mejor horario para visitar esta atracción natural es en la madrugada, para que desde lo más alto de la Sierra, aprecies el amanecer y la salida de las guacamayas.
Pero ¿cómo se formó este impactante fenómeno natural? Los guías explican que hace 1.5 millones de años, una enorme fractura vertical originó no sólo esta cueva vertical, sino los grandes cañones de la zona. Por su historia y por los maravillosos paisajes que ofrece, el Sótano del Barro es una atracción que todos los mexicanos deberían conocer.