Atrás quedaron los tiempos en los que Donald Trump, al frente de Miss Universo, amenazaba con quitar la corona a Alicia Machado por subir de peso. Las reinas de belleza actuales viven una apertura que les permite defenderse, y un ejemplo es Andrea Meza, quien con unas semanas en el “cargo” y como cualquier otra joven de su edad, presume abiertamente su nuevo romance, lo defiende y hasta lo formaliza.
Tras cumplir su primera ronda de compromisos en Nueva York, Andrea también tiene sus vacaciones de verano y desde el domingo pasado y hasta el 24 de julio estará en su natal Chihuahua, donde la recibieron con una caravana. Su familia estuvo presente, pero también Ryan Antonio, quien se ha vuelto su inseparable y viajó para conocer de manera formal a sus suegros.
Pero, ¿de dónde salió el galán de Andrea? Ella fue quien confesó que previo a Miss Universo ya conversaban vía redes sociales, aunque fue durante la preparación del concurso que él viajó a Miami para tener algunas participaciones en programas de televisión, y ahí los presentaron en persona, en una cena del 5 de mayo, entre mariachis.
Lo que sabemos es que Ryan Antonio nació en Missouri, tiene 32 años y saltó a la fama por TikTok e Instagram, donde comparte unas divertidas clases de español. Se le conoce con el mote de “El Gringo”, ya que ocupa la plataforma social para acercar a los estadounidenses con los contextos latinos a través del uso de frases divertidas en nuestro idioma.
Andrea, quien en agosto próximo cumplirá 27 años, mostró abiertamente su noviazgo poco después de recibir la corona de Miss Universo, y ante las críticas de los fans respecto a que una reina de belleza no debe tener pareja, se defendió de la manera más directa y correcta: “Cada quien decide cómo manejar su vida privada. El gran problema que enfrenta la mujer en el ambiente laboral es que se piensa que si tiene familia (novio, hijos, etc.) no va a dar el ancho en un puesto importante por estar ‘distraída’. Muchas hemos demostrado que no es así y la mujer no debería ser juzgada por este factor. Yo trabajo cien por ciento entregada a mis labores, y mi tiempo libre lo manejo a mi gusto, sin esconderlos, porque esa es la imagen que quiero dar: una mujer real que debe mantener un equilibrio en su vida”.
Y tan real es que derrama amor con su novio. Ambos se mandan mensajes en las redes sociales y él comparte diversas imágenes en compañía de ella, en algunas incluso bromea que “esta relación es tan seria para mí, que ni sonrío en la foto”. Eso sí, como se trata de practicar su español, en todas las fotos con Andrea le agrega el hashtag “alma”.
¿Les gusta cómo derraman miel?