Basada en hechos reales y dirigida por Matt Ruskin, ‘El Estrangulador de Boston’ llega como un true crime más de la creciente tendencia de producciones cinematográficas que encuentran su guion en crímenes muy sonados que se cometieron en décadas pasadas. Estrenos que el público pide a gritos y acepta de la mejor manera. Porque siendo sinceros, las carpetas de casos resueltos o cerrados sin llegar a una conclusión hasta mucho tiempo después, están repletas de historias que nos intrigan y entretienen.
Esta vez ha sido el turno de Star+ de estrenar este 17 de marzo esta cinta protagonizada por Carrie Coon y Keira Knightley, que definitivamente se vuelve relevante y vigente al hablar sobre feminicidios y apuntar a la yugular de la figura policiaca, por su ineptitud para tomarse en serio el asesinato de varias mujeres y no ser capaz de establecer una investigación eficaz y fructífera cuando, en realidad, ese era su trabajo.
En cambio, exalta el trabajo de dos mujeres periodistas que arriesgaron su carrera y su vida por darle voz a las víctimas y encontrar al asesino serial que aterrorizaba a todas las mujeres de Boston, sin importar edad o clase social.
«Había escuchado del Estrangulador de Boston, pero no sabía nada del caso, hasta que leí el maravilloso guion de Matt. Creo que es bastante interesante volver a contar la historia de este asesino, pero a través del punto de vista de estas dos periodistas», explicó Keira en conferencia de prensa. «Especialmente porque la mayoría de la gente no sabe que fueron estas dos mujeres quienes empezaron a contar la historia, y ahora tratan de ser borradas».
¿De qué va el ‘El Estrangulador de Boston’?
Se ubica en la década de los 60. Loretta McLaughlin (Keira Knightley) es una periodista que trabaja en la sección de estilo de vida del periódico Boston Record American. Loretta lucha por crecer profesionalmente y escribir historias dignas de primera plana, pero es infravalorada por ser mujer. Las pocas periodistas de ese tiempo sólo eran consideradas para las secciones de soft news.
Con la finalidad de salir un poco del encasillamiento en el que se siente, Loretta comienza a escribir sobre un par de asesinatos, pero siguiendo su instinto periodístico nota que hay una relación entre tres de esos homicidios y se convierte en la primer persona en vincular los asesinatos de estas tres mujeres a manos de un hombre que las viola y luego las asfixia con sus propias medias.
Tras ser todo un éxito de primera plana, la policía le pide al periódico dejar la historia, pues no los está dejando especialmente bien parados. Tras impedirle seguir escribiendo al respecto, su editor Jack (Chris Cooper) accede y le pide que trabaje en conjunto con su colega Jean Cole (Carrie Coon).
Mientras el periódico se vuelve más popular y famoso por la figura de las dos periodistas, y la policía no sigue las pistas que les ofrecen y entorpece el caso, Loretta y Jean siguen desmenuzando el comportamiento del asesino, a pesar de recibir varias amenazas.
Luego de tener en la mira a varios sospechosos, al fin encuentran al culpable, no sin antes darse cuenta que aunque atraparon a un asesino serial, aún quedan varios hombres afuera dispuestos a cometer un feminicidio o dejarlo pasar.
La historia real de ‘El Estrangulador de Boston’
Entre 1962 y 1964 se encontraron 13 mujeres violadas y asesinadas en los alrededores de Boston, Massachusetts. Las mujeres fueron asesinadas dentro de sus casas, tenían entre 19 y 85 años, vivían solas y en ninguno de los casos se encontraron señales que indicaran que el agresor entró a la fuerza. Fue alguien que se ganó su confianza para poder entrar y una vez dentro de sus casas las violaba y asfixiaba con sus propias medias.
El rango de edades y el hecho de que no tenían conexión entre ellas, fue suficiente pretexto para que la policía de ese entonces descartara la posibilidad de que fuera un asesino serial. Sin embargo, las periodistas Loretta y Jean se aferraron a las pistas y a su investigación para darle seguimiento a la historia y presionar a las autoridades. Y aunque fueron de gran ayuda, sacaron sus nombres de la historia. «Sus nombres nunca se mencionan con nada relacionado al caso. Eso me dejó en shock», relató la actriz Carrie Coon.
En 1964 Mary Sullivan, de 19 años, fue la víctima que se logró escapar y ayudó a que atraparan al asesino.
Voces de mujeres que quisieron callar
Además de contar la historia real que sucedió con el asesino serial Albert DeSalvo, la cinta lleva tres claros mensajes que impulsa a través del ritmo de su edición, los encuadres y los diálogos. En primer lugar apunta a la tibieza que tienen las autoridades para proteger a sus ciudadanas, incluso cuando se trata de más de 10 homicidios que tienen la misma firma: las medias alrededor del cuello.
En segundo lugar, le da foco a la variedad de sospechosos que las periodistas tenían en la mira. Y principalmente, nos deja por ahí abierta la posibilidad de que en realidad cualquiera podría ser el asesino. Algo que hoy en día, particularmente en México, vivimos. Pudo ser el novio, el ex, el tío, el «amigo», el jefe, el amante, un compañero de trabajo…
Y aunque esto sucedió en la época de los 60, hoy en día se sigue sintiendo bastante vigente.
Por último, sirve como un homenaje para aquellas dos periodistas que, en primer lugar, se atrevieron a formarse en una profesión que en ese entonces era impensable para mujeres, a menos que se tratara de temas de estilo de vida o belleza. Además de arriesgar su vida para continuar con una historia que ayudó a que atraparan al asesino y se hiciera justicia por las víctimas.
«Entre más sabía de estas dos mujeres y reporteras, más crecía mi admiración por ellas y me sentí obligado a contar su historia», compartió Matt Ruskin.