El verano ya llegó y con él, la prenda más solicitada de la temporada sale de tu guardarropa. Para mantener tu traje de baño en perfectas condiciones y así lucir impecable, te damos 5 consejos básicos para su uso y su cuidado.
El primer consejo y tal vez el más importante. Tu bikini, short (en el caso de los hombres) o cualquiera que sea la presentación de tu traje, debe ajustarte estupendamente. Si es de una talla más pequeña, dejarás poco a la imaginación y ése es un rotundo don’t de estilo para la playa. Si es más grande, corres el riesgo de perderlo en la primera ola o con el primer clavado.
Para mantener tu outfit playero en condiciones óptimas, después de cada chapuzón en el mar o en la alberca, lo más recomendable es enjuagarlo con bastante agua limpia para eliminar el exceso de cloro y sal del traje de baño. Así, disminuirás el desgaste provocado por estos dos componentes de la época de calor.
Cada que salgas de vacaciones, al menos debes empacar 3 bikinis o shorts. Uno para usarlo en la mañana, otro en la tarde y el tercero, para alternarlo al día siguiente sin tener que usar uno que aun esté mojado. Dependiendo de los días de tu visita y del lugar en dónde te hospedes, haz las cuentas y empaca la cantidad que sea necesaria.
Por ningún motivo utilices un traje de baño blanco, porque cuando esté mojado, bueno… todos sabemos lo que puede ocurrir.
Los trajes de baño, fueron creados para la piscina, el mar, la playa y el pool bar. Si deseas desayunar o comer en un restaurante, va a ser necesario que cambies de outfit por algo que sea más acorde a la situación.
Estos pequeños consejos, a parte de hacerte lucir increíble, te mantendrán con estilo del día a la noche durante todas tus vacaciones. Lo único que tienes que hacer, es apegarte a estos sencillos tips.
