En Kyoto, Japón, se encuentra uno de los lugares más espectaculares del mundo, el bosque de bambú de Arashiyama. Una experiencia única, perfecta para los amantes de la naturaleza.
Este majestuoso bosque de bambú está ubicado en las faldas de las «Montañas de la Tormenta», en la provincia de Arashiyama, al noroeste de Kyoto. Quienes lo han visitado, afirman que es un verdadero santuario en donde pueden encontrar tranquilidad y que la sensación de estar ahí es prácticamente indescriptible.
La particularidad del bosque son sus imponentes bambúes. Los árboles altísimos y esbeltos, tan frondosos en las copas, prácticamente forman una cúpula que poco deja entrar la luz, creando una atmósfera muy particular.
Se dice que con el viento, los árboles rozan unos con otros provocando una especie de murmullo. Por ello, al bosque se le conoce también como uno “100 paisajes sonoros de Japón”.
Estar en el bosque de Arashiyama es como estar en un sueño y a pesar de ser un punto con una alta afluencia turística, no pierde su encanto. Recorrerlo toma al rededor de una hora y puedes hacerlo caminando o en bici. La vista es simplemente espectacular.
Se trata de un sendero de 500 metros de camino, flanqueado por los infinitos árboles de bambú, que inicia en el Templo Tenryu-ji y finaliza en el Santuario de Nonomiya. Además de ser el sitio perfecto para los amantes de la fotografía, a lo largo del trayecto podrás encontrar artesanos vendiendo diversos productos de bambú, hechos a mano.
Puede que parezca corto el recorrido, pero seguramente no te resistirás a tomar fotografías a cada paso que des. Es un lugar para disfrutar con calma.
El bosque está abierto las 24 horas del día y la entrada es gratuita, por lo que se recomienda visitarlo muy temprano por la mañana o al atardecer, para deleitarse del camino iluminado por cientos de lámparas.
Sin duda, una visita obligada si estarás de viaje por Kyoto.
