Si quieres que cada centímetro de tu piel sea ultra suave y acariciable, no necesitas esforzarte ni invertir tanto dinero para lograrlo. Solo es cuestión de constancia y de que crees tu propio exfoliante casero con ingredientes 100% naturales y efectivos.
Si tienes la piel grasa es importante que te exfolies con regularidad para eliminar todas las células muertas y evitar que se tapen tus poros; procura hacerlo un día sí y otro. Muele un cuarto de kiwi con una fresa y agrégales yogurt natural, haz una mezcla, aplícala sobre tu rostro y haz movimientos circulares durante un minuto. Enjuaga con agua mineral.
Si eres de piel sensible, exfóliate cada quince días o una vez al mes, y hazlo con productos suaves que no irriten ni enrojezcan tu piel. Por ejemplo, un poco de avena con leche. Mézclalos y haz una pasta pegajosa, aplícala en tu piel sin tallar y enjuaga con agua mineral. ¡Es el calmante perfecto para tu cutis!
Si no tienes ningún problema con tu piel, exfóliate una vez por semana con dos cucharadas de azúcar morena y un chorrito de aceite de olivo. Después de aplicarlo, limpia tu cara con una toalla húmeda y caliente, y luego enjuaga con agua mineral.
Recuerda, todos estos métodos son seguros y pueden ser aplicados sobre todo tu cuerpo, pero evita el área de los ojos.