La discreción fue la clave en la boda secreta de Christian Nodal y Ángela Aguilar, pero una de las invitadas se convirtió en “la ventana” de un evento oculto: Nadia Ferreira, modelo paraguaya y esposa del cantante Marc Anthony.
Ella fue el centro de atención el pasado 24 de julio cuando compartió a través de sus redes sociales unas enigmáticas imágenes que, sin buscarlo, desvelaron parte de la celebración. Con su hijo Marco en brazos y una expresión de asombro en su rostro, Ferreira capturó la esencia mágica del lugar, despertando la curiosidad de miles de seguidores y medios de comunicación.
«Explorar contigo es mi pasatiempo favorito», escribió Nadia en una de sus publicaciones, acompañada de fotos que revelaban la opulencia de la Hacienda San Gabriel de las Palmas. El lugar, con su arquitectura colonial, fuentes de agua y jardines exuberantes, fue el escenario perfecto para el enlace nupcial, cuyos detalles se han mantenido en secreto por parte de los protagonistas.
La expectación aumentó cuando Víctor Guadarrama, el maquillador de las estrellas, compartió una imagen junto a Ferreira. La modelo lucía un impresionante maquillaje que resaltaba sus ojos azules y un sofisticado peinado recogido.
Con un vestido animal print y una delicada cadena de Van Cleef, Nadia robó miradas y, sin pretenderlo, confirmó su presencia en la boda. A pesar del hermetismo, las redes sociales de Ferreira y Guadarrama fueron pistas suficientes para que los seguidores y la prensa hilvanaran las conexiones.
Las especulaciones de que Nadia y Marc Anthony podrían haber sido los padrinos de la boda surgieron rápidamente, sumando más misterio a la velada.
Más detalles de la boda
Aunque hasta el momento no hay declaraciones oficiales de los recién casados ni de sus invitados, las imágenes filtradas muestran a Nodal y Aguilar radiantes, acompañados de un selecto grupo de 45 personas, entre familiares y amigos cercanos.
El enlace, que combina lo tradicional y lo moderno, parece ser un reflejo de la relación de la joven pareja, quienes decidieron dar este paso tras pocos meses de noviazgo. Ángela, con un vestido vintage y los aretes de su abuela Flor Silvestre, y Nodal, elegante y sobrio, prometieron amor eterno en una ceremonia que muchos esperaban, pero pocos pudieron presenciar.
Así, mientras la pareja mantiene un perfil bajo y guarda silencio sobre los detalles de su unión, Nadia Ferreira, sin quererlo, se ha convertido en la narradora de un cuento que aún tiene muchas páginas por descubrir.