Actualmente hemos escuchado el nombre de Margot Robbie hasta en la sopa. Y la verdad es que la actriz se merece todo el reconocimiento que está recibiendo. Pero llegar hasta donde está fue algo que en una época ella sólo vio en sueños, pues la vida de Margot no siempre fue color de rosa.
De Subway directo a Hollywood
Antes de convertirse en la gran estrella que es, Robbie vivía en Brisbane, Australia, junto a sus padres y hermanos. Su padre llevaba una granja de caña como negocio familiar y era de ahí de donde conseguían el dinero para subsistir.
Sin embargo, su padre los abandonó y esto representó una gran crisis para la familia. A pesar de que su madre hacía todo lo posible por cuidar de sus hijos, éstos tuvieron que comenzar a trabajar a muy temprana edad para apoyar con los gastos familiares.
Durante su infancia y adolescencia, Margot tuvo múltiples trabajos, incluso desde antes de cumplir los 17 años. «He trabajado en restaurantes, detrás del bar, en la cocina, hice ventas al por menor durante dos años, hice un trabajo como secretaria; he tenido todo tipo de trabajos», reveló la actriz en una entrevista. Se sabe que incluso trabajó como servidora doméstica.
Fue hasta que un director de cine independiente la descubrió mientras trabajaba en un Subway. “Vigilante” fue el primer proyecto de actuación de Margot y posteriormente su papel en el programa de televisión “Neighbours” fue lo que le dio un pase directo a Hollywood.
La vida de Margot Robbie en Hollywood
Desde entonces, la actriz de 33 años ha conseguido papeles estelares en varias de las producciones más grandes del cine. Margot no sólo ha demostrado el gran talento que tiene para la actuación, sino que además le gusta escoger papeles que le permitan explorar nuevos horizontes.
Ha reflejado la sensualidad de Naomi en “El Lobo de Wall Street”; la locura e ingenio de Harley Quinn en “Escuadrón Suicida” y “Aves de Presa”; la exigencia personal de Tonya Harding en “Yo, Tonya”, y ahora la belleza y crisis existencial de Barbie en “Barbie”, sólo por mencionar algunos de sus proyectos.
Margot ahora puede ver que todo su esfuerzo y trabajo que hizo desde pequeña están dando frutos. Y aunque en su momento seguramente la pasó difícil, ella es un ejemplo de que nunca hay que dejarse vencer por las circunstancias de la vida.