A pesar del polémico proceso de divorcio por el que atraviesa la ex pareja y que Kanye ha hecho algunas locuras para recuperar a su familia, esta vez fue inevitable el reencuentro entre ambos.
El fin de semana, Kim celebró el cumpleaños de su pequeña hija Chicago, de 4 años, y aunque el rapero no fue invitado, no dudó en presentarse al festejo.
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Horas antes Kanye aseguró que Kim no le dejaba ver a sus hijos e incluso afirmó que le había ocultado la dirección de dónde se iba a realizar el festejo.
«A principios de esta semana, el lunes, cuando fui a recoger a mis hijos de la escuela, la seguridad me detuvo en la puerta. Entonces, en ese momento la seguridad estaba entre mis hijos y yo, y eso es lo que no iba a suceder. Pero no quería discutir sobre eso. Así que me relajé, llevé a mis hijos a la escuela y luego me los llevé de vuelta. En ese momento North me dijo: ‘Quiero que subas y veas algo’. Y es como, ‘Oh, papá no puede ir a ver algo, o papá no puede entrar”, expresó Kanye.
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El cantante agradeció a Travis Scott por darle los detalles de la fiesta y a Kylie Jenner por brindarle acceso al evento: “Estoy tan feliz en este momento, acabo de llegar de la fiesta de Chi. Solo tengo que agradecer a Travis Scott por enviarme la dirección y la hora y asegurarse de que pudiera pasar ese recuerdo de cumpleaños con mi hija”, comentó Kanye en un video, “Kylie me dejó entrar justo cuando llegué al lugar, porque la seguridad me detuvo una vez más cuando llegué allí”.
En algunas imágenes se aprecia a Kanye cargando a la pequeña Chicago para pegarle a la rosa piñata que formó parte de una decoración repleta de globos, pasteles y dulces con temática de LOL Surprise Doll y Barbie, misma a la que también asistieron Khloé Kardashian junto a su hija True, la hija de Rob Kardashian, Dream, y Kourtney Kardashian con sus hijos.
