Por fin llegó el esperado final de la temporada 3 de The White Lotus, y con él, una pregunta irresistible: ¿dónde queda ese paraíso exótico que robó cámara tanto como sus protagonistas?
La exitosa serie de HBO creada por Mike White no solo nos tiene enganchados con su crítica mordaz a la élite privilegiada, sino que también se ha convertido en una guía involuntaria de viajes de lujo.
Después de Hawái y Sicilia, The White Lotus aterrizó en Tailandia para su tercera entrega, en un entorno tan visualmente espectacular que el hotel parece otro personaje más.
La joya de Tailandia: Four Seasons Resort Koh Samui
El principal escenario de esta temporada es el Four Seasons Resort Koh Samui, ubicado sobre una colina con vistas de infarto al Golfo de Tailandia. Este hotel no solo es real, sino que está abierto al público (con presupuesto de multimillonario, eso sí).
Las tarifas inician en aproximadamente 26 mil 560 pesos mexicanos por noche, y cada una de sus 71 villas ofrece piscina privada, servicio de mayordomo, y vistas que parecen salidas de un sueño húmedo de Instagram.
Entre palmeras, estatuas de monos y arquitectura tradicional tailandesa, el hotel ofrece una mezcla envolvente entre lujo extremo y espiritualidad superficial—un contraste que la serie explora con ironía y drama. Como dijo el actor Jason Isaacs, quien se alojó en el hotel durante el rodaje: “Fue como estar en una jaula dorada”.
Anantara Mai Khao Phuket, el spa donde se desata el caos
La tercera temporada también nos regala el esperado regreso de Belinda (Natasha Rothwell), quien ahora trabaja en un spa de alta gama —en la vida real, el Anantara Mai Khao Phuket.
Este centro de bienestar es un oasis rodeado de estanques de loto y pabellones abiertos donde se ofrecen masajes con bambú, terapias de sonido y, claro, algunas confesiones oscuras.
Más allá del hotel, templos, playas e intriga en Bangkok
Los creadores de The White Lotus no se limitaron a un solo resort. La temporada 3 también nos lleva a recorrer otros rincones de Tailandia: desde los serenos jardines del Wat Pu Khao Thong, un templo budista en Koh Samui, hasta el caos vibrante del Fisherman’s Village, donde se celebra el Año Nuevo tailandés con pistolas de agua y tensiones a flor de piel.
Algunas escenas también se rodaron en Bangkok, y aunque la producción ha sido discreta sobre los detalles, todo apunta al legendario Mandarin Oriental Bangkok como uno de los sets secretos, especialmente su elegante Bamboo Bar, que podría ser el escenario de uno de los momentos más reveladores de la temporada.
¿Se puede vivir la experiencia White Lotus?
Sí y no. Puedes hospedarte en los resorts, reservar un tratamiento espiritual en el mismo spa que Belinda, o pasear por los templos y mercados que exploran los personajes. Pero no podemos garantizarte la dosis de intriga, sátira y tragedia que trae cada temporada.
