A menos de un mes de la trágica muerte, el 16 de octubre en Buenos Aires, Argentina, del cantante británico y exmiembro de One Direction, Liam Payne, el productor estadounidense Sam Pounds había anunciado que lanzaría el último tema que grabó el joven cantante: “Do No Wrong”.
Sin embargo, horas después de anunciar la noticia el productor se retractó y aseguró que aún no era tiempo de hacerlo, por respeto a su familia. “Todavía no es el momento. Todos seguimos de luto por la muerte de Liam y quiero que la familia se levante en paz y en oración. Todos esperaremos. Con amor, Sam Pounds”, escribió en sus redes sociales.
Además dijo que deseaba que todas las ganancias que genere el tema sean destinadas a una organización benéfica que ellos (la familia) elijan.
“Do No Wrong”, una canción muy especial
Para Liam Payne, “Do No Wrong” tenía un significado profundo y personal, no sólo por su mensaje de fortaleza, sino porque marcaba su primera colaboración con su hermana mayor, Ruth Gibbins.
La canción simboliza el anhelo de paz y redención que el artista buscaba en medio de sus batallas internas. “Finalmente estaba haciendo la música que quería”, escribieron algunos seguidores tras conocer la noticia.
November 1st🙏🏽 pic.twitter.com/bLbPxaqZBC
— Sam Pounds (@iamsampounds) October 26, 2024
En marzo, Payne ya había lanzado el sencillo “Teardrops”, una balada sobre el desamor y la superación personal.
El legado de Payne, un joven que conoció la fama a temprana edad y quien en años recientes habló abiertamente sobre los estragos de la fama y su lucha contra el abuso de sustancias, permanece en cada nota de “Do No Wrong”.
Su voz, cargada de vulnerabilidad y autenticidad, parece hablar desde un lugar más allá, como si supiera que esta podría ser la última oportunidad de compartir su arte con el mundo. Para muchos, la canción será una sanación, un recordatorio de que en vida o muerte el amor y la música pueden superar el dolor.