Cuando no hay suficiente limpieza en tu rostro o simplemente tu alimentación no es la más saludable para tu piel, ésta comienza a expresártelo de la manera que sabe: granitos o puntos negros. Los últimos son los más odiosos pues penetran hasta el fondo tu piel y no es fácil quitarlos para siempre. Por ello te damos 3 exfoliantes que puedes hacer en tu casa para remediar este mal.
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Mezcla bicarbonato de sodio con el jugo de un limón hasta obtener una pasta fina. Así puedes ‘rascar’ tu piel y eliminar esos puntitos.
Otro muy efectivo es mezclar una calara de huevo y un pañuelo desechable para extraer los puntos negros.
Por último la mascarilla de arcilla de bentonita la puedes encontrar en una tienda naturista, pero debes mezclarla con una cucharada de agua o vinagre de manzana. Deja reposar la mezcla por 15 o 20 minutos hasta que se seque y retira con agua tibia.